El cine en música 2
¿Qué es la música? Etimológicamente, podríamos decir que proviene del griego μουσική (musiké) y μουσικός (musikós) que significa "propio de o relativo a las musas". Y hace perfectamente sentido en el contexto de lo que quiero compartir en este post, ya que Inma Shara —digna descendiente, sino reencarnación misma de las musas— estuvo en Lima hace algunas semanas, y vino precisamente a regalarnos "música", en el sentido más sublime de la palabra.
En el 2010, uno de mis sueños de toda la vida se cumplió, gracias al concierto sinfónico "El cine en música", a cargo de la joven director y compositora española —Inmaculada Concepción Lucía Saratxaga (Amurrio, Álava, España, 1972)—. Aquella fue una noche inolvidable por varias razones. Por una parte, la experiencia de sentir y vibrar con las bandas sonoras interpretadas por la Orquesta de la Ciudad de los Reyes; y por otra, el compartir ese momento con la Ceci —otrora mi compañera de sueños y aventuras— y por supuesto con mi pequeña Valeria.
¿What if?
Mientras esperaba a que llegara José Manuel en la puerta del colegio Santa Úrsula, pensaba: si mi madre y Keri Carpenter hubieran tenido que ir más temprano a su evento, no me hubiesen podido traer al "Chico Loco"... si mi reunión con Mónica Miranda no hubiera terminado a las 5.50 p. m., no hubiese podido alcanzar a comprar las entradas en Teleticket antes de las 6 p. m... si no hubiera podido acceder a la página web de suscriptores de El Comercio, no podía haber visto que era cierto que Inma Shara estaba en Lima ese mismo día... y si Eduardo Rengifo no hubiera tenido su reunión en la sala que está al lado de mi sitio, nunca me hubiese comentado que una joven director española había venido al Perú a ofrecer un concierto sinfónico de bandas sonoras... ¿Confabulación cósmica? ¿Impostergable destino? ¿Mera coincidencia? Nunca lo sabré.
El mensaje
Esta vez la performance fue mucho más delicada y romántica, como en Historia de Amor (Francis Lai, 1970) o Pearl Harbor (Hanz Zimmer, 2001); mientras que fue avasalladora y vigorosa en Piratas del Caribe (Klaus Badelt, 2003) y en los infaltables temas de John Williams (La Guerras de las Galaxias e Indiana Jones). Tanto José Manuel como yo, disfrutamos cada segundo del concierto.
Hace poco, Gonzalo Tello publicó una entrevista con Inma Shara, precisamente a raíz de su visita al Perú. En un momento de la entrevista, le pregunta:
—Defíname la palabra "música".
—La vida —le responde ella.
De regreso a la noche del concierto, antes de cerrar el telón, la orquesta nos emocionó con un tema que no estaba en el programa, un tema sorpresa, una de mis bandas sonoras favoritas; sentí como si la propia Inma Shara me estuviera enviando un mensaje, un recordatorio: la vida es bella.
Entradas relacionadas:
En el 2010, uno de mis sueños de toda la vida se cumplió, gracias al concierto sinfónico "El cine en música", a cargo de la joven director y compositora española —Inmaculada Concepción Lucía Saratxaga (Amurrio, Álava, España, 1972)—. Aquella fue una noche inolvidable por varias razones. Por una parte, la experiencia de sentir y vibrar con las bandas sonoras interpretadas por la Orquesta de la Ciudad de los Reyes; y por otra, el compartir ese momento con la Ceci —otrora mi compañera de sueños y aventuras— y por supuesto con mi pequeña Valeria.
¿What if?
Mientras esperaba a que llegara José Manuel en la puerta del colegio Santa Úrsula, pensaba: si mi madre y Keri Carpenter hubieran tenido que ir más temprano a su evento, no me hubiesen podido traer al "Chico Loco"... si mi reunión con Mónica Miranda no hubiera terminado a las 5.50 p. m., no hubiese podido alcanzar a comprar las entradas en Teleticket antes de las 6 p. m... si no hubiera podido acceder a la página web de suscriptores de El Comercio, no podía haber visto que era cierto que Inma Shara estaba en Lima ese mismo día... y si Eduardo Rengifo no hubiera tenido su reunión en la sala que está al lado de mi sitio, nunca me hubiese comentado que una joven director española había venido al Perú a ofrecer un concierto sinfónico de bandas sonoras... ¿Confabulación cósmica? ¿Impostergable destino? ¿Mera coincidencia? Nunca lo sabré.
El mensaje
Esta vez la performance fue mucho más delicada y romántica, como en Historia de Amor (Francis Lai, 1970) o Pearl Harbor (Hanz Zimmer, 2001); mientras que fue avasalladora y vigorosa en Piratas del Caribe (Klaus Badelt, 2003) y en los infaltables temas de John Williams (La Guerras de las Galaxias e Indiana Jones). Tanto José Manuel como yo, disfrutamos cada segundo del concierto.
Hace poco, Gonzalo Tello publicó una entrevista con Inma Shara, precisamente a raíz de su visita al Perú. En un momento de la entrevista, le pregunta:
—Defíname la palabra "música".
—La vida —le responde ella.
De regreso a la noche del concierto, antes de cerrar el telón, la orquesta nos emocionó con un tema que no estaba en el programa, un tema sorpresa, una de mis bandas sonoras favoritas; sentí como si la propia Inma Shara me estuviera enviando un mensaje, un recordatorio: la vida es bella.
Entradas relacionadas:
Comentarios