Cine: La Joven de la Perla (2003)

El martes pasado, fechado con el 6/6/6, me encontraba en la cola del Cineplanet Alcázar, decidido totalmente a comprar mi entrada para la película del momento: "La Profecia 666". Todo iba bien, hasta que llegué a la boletería; y fue cuando un empleado del cine colocó un cartelito que decía: "AGOTADO!". A pesar de mi especial interés en el remake de una mis películas favoritas de todos los tiempos, recordé —con algo de consuelo— el comentario de mi amigo Julio Ríos, quien la había visto "de estreno" en la medianoche y que la catalogaba como un fiasco. Asi que comencé a ver qué otras opciones tenía y, casi desapercibido, leí el título "La Joven de la Perla". Le pregunté al empleado del cine y me entregó un folleto en el que se mencionaba lo esperado de su estreno en Lima, sus 3 nominaciones al Oscar, 2 al Globo de Oro, 10 al BAFTA y otras más. Se trataba del importante debut de Peter Webber, en el año 2003, y que finalmente llegaba al Perú para el beneplácito de los amantes del séptimo arte.

El título original era "Girl with a Pearl Earring", y era la adaptación de la novela homónima de Tracy Chevalier, que trata acerca de Griet, interpretada por la maravillosa Scarlett Johansson, quien también debutaba en un rol protagónico. Griet es la joven criada de la casa del pintor barroco Johannes Vermeer (Colin Firth), en la ciudad de Delft (Holanda) en el siglo XVII. La película se desenvuelve de manera pausada, mostrando con detalle el peculiar ambiente doméstico de la familia del pintor, del vecindario y de la ciudad de Delft. La transformación de Griet, desde su llegada a la casa del maestro, la lleva al descubrimiento de su propia sexualidad, siendo el objeto de deseo de los tres personajes de la historia: el enamorado hijo del carnicero, el inescrupuloso mecenas del pintor y el propio Vermeer, quien sublima ese deseo inmortalizándola en el retrato. Mi escena favorita es la que muestra al maestro perforándole el lóbulo de la oreja para que pueda colgarle el arete de perla; para Griet es el momento más íntimo y sensual de su vida, mientras que para Vermeer, el éxtasis consistía en terminar ese detalle final de la pintura, lo que sigue deben verlo con sus propios ojos.
Otro aspecto que me impactó de la película fue el talento y la técnica del artista, muy bien expuestos por el director del filme. Vermeer jugaba enormemente con los claroscuros: por ejemplo, retratando con una ventana abierta en el lado izquierdo dejando entrar la luz natural. A pesar la presencia de personas en sus óleos, lo verdaderamente importante para el maestro era el espacio y la luz. Van Gogh, escribe a su hermano refiriéndose a Vermeer: "La paleta de este extraño artista comprende el azul, el amarillo, el gris perla, el negro, el blanco... con un gusto extraordinario y un infalible sentido de la composición". La luz y la composición son los elementos más importantes de la fotografía, por lo que el trabajo de Vermeer es estudiado y admirado por muchos grandes fotógrafos.

Para el próximo 2007, el director inglés (Webber) estará revelándonos los orígenes del personaje del autor Thomas Harris, en lo que será la precuela de la saga del "caníbal". La película se titula "Young Hannibal: Behind the Mask"; y en entre cosas, conoceremos acerca de la muerte de los padres de Lecter, víctimas del canibalismo de un retorcido soldado.

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