Ante la maldad

Impotente. Me encuentro sentado en mi escritorio. Aun siento mi corazón como si hubiese sido apretado y luego soltado bruscamente. Recuerdo detalles vagos de lo vivido hace veinte minutos. No se tiene mucha noción del tiempo cuando se ha estado tan cerca de la maldad retorcida del hombre. 10:50 AM Auxiliar de la Vía Expresa - Av. Paseo de la República (altura del puente peatonal entre Aramburú y Corpac) Distrito de San Isidro, Lima El automóvil negro delante mío no avanzaba, no me percaté en ese momento que estaba con luces de emergencia. Decidí esperar, porque igual había tráfico en el otro carril. Luego de unos segundos comenzó a avanzar lentamente. Yo seguía detrás, algo distraído conversando con la Pao, una compañera de trabajo quien me pidió la llevara a hacer unos trámites, cerca de la oficina. Cuando estábamos ya a la altura del puente peatonal, la puerta trasera izquierda del auto negro se abrió, y ante mi estupor un cuerpo inanimado fue arrojado hacia la vereda. En esos micros...